Detrás de cada pieza de diseño se encuentra un legado de manos colombianas que traducen el arte y la ciencia en mobiliario de alto nivel estético. Nuestros productos no sólo son fabricados en Colombia sino también ideados en el país.
Este blog es una conversación con el diseño - o mejor - con el proceso creativo de los autores de nuestras piezas. En cada parte del proceso hay un diseñador consciente, humano, que piensa en la finalidad de una pieza, una mesa, una silla. Es un creador inspirado, intuitivo, apasionado, lógico, que se sienta frente al papel y se enfrenta al desafío de empezar.
Hablamos con una de las diseñadoras que hacen parte de nuestra casa, creadora de producto para The Blue House. Daniela Duarte, Diseñadora de Mobiliario y Diseño Textil graduada en Savannah College of art and design en Georgia, quien trabaja para la firma de diseño 5 Sólidos en Medellín.
Desde su perspectiva del mundo del diseño, habló sobre el proceso creativo, sus retos, la conexión que encuentra en las diferentes disciplinas, volviendo visible la historia detrás de nuestros productos.
INSPIRACIÓN Y RETO
Para Daniela, el mayor reto es el abanico de posibilidades a la hora de diseñar y a su vez encontrar el instante perfecto para la inspiración. Para ella no hay un momento preciso, puede ser algo muy efímero que llega a las 12 de la noche o a las 3 de la tarde estando en la oficina, puede llegar rayando unas ideas en un papel o estando sentada en un parque rodeada de naturaleza, lo importante es no cerrarse para que la inspiración no se pierda; siempre hay que nutrirla de diferentes maneras, ella lo hace a través del dibujo. “Me inspiro en obras de arte abstracto cuando tengo que diseñar algún producto de forma abstracta”. Lo que un día ve como unos rayones insignificantes, otro día, mirándolos con otros ojos, se convierten en un producto, un objeto completamente diferente.
EL PROCESO CREATIVO
Según Daniela, el proceso creativo no tiene un step by step que los diseñadores sigan al pie de la letra, pero sí, independientemente de la disciplina, sea arquitectura, diseño de modas, diseño gráfico, o cualquier otra, hay un objetivo común y es saber para quién se está diseñando, por qué se está diseñando, qué emociones se quieren crear y la manera en cómo las personas interactúan con el producto, para ella esto es lo que le dará un sentido al proceso creativo.
El primer paso de Daniela, no es necesariamente tener todas las preguntas anteriores resueltas, muchas veces empieza por rayar ideas en el papel, mirar referentes, no sólo para encontrar una inspiración del aspecto del producto, si no para saber que hay en el mercado y que puede ofrecer que se diferencie del resto.
Luego de inspirarse en obras de arte, especialmente en esculturas, empieza a rayar sobre el papel, a mezclar ideas y conceptos que le hayan gustado de otros dibujos, para finalmente crear un producto. Siempre dibuja el producto y los detalles que quiere que estén en el 3D y no al revés para no limitarse. “El dibujo a mano alzada es muy valioso, hay que perder el miedo a rayar cosas que al final no van a ser usadas”.
Ya después de tener algo visualizado que siente que va a funcionar en una tienda o un espacio, lo comienza a construir en el 3D empezando siempre por la ergonomía. “Empiezo con las medidas genéricas, por ejemplo, al diseñar una silla pienso en que altura debe tener, qué tan alto es el espaldar, que tanto debe ser el ángulo para recostarse, por eso debo entender mucho el contexto para donde va la silla” explica Daniela.
Entender el espacio cambia mucho las medidas de un producto, por eso primero define formas muy básicas y luego las empieza a detallar, realiza el plano técnico y finalmente el prototipo al que considera fundamental, cuando este es aprobado puede ser producido.
EL MUNDO DEL DISEÑO Y LAS TENDENCIAS
Para Daniela el mundo del diseño se conecta de todas las formas posibles, lo que se ve en arquitectura y en moda después lo ve reflejado en el mobiliario. “Hay que estar abierto a todos los tipos de diseño para poder inspirarse y ver las tendencias del mercado. Hay una página que me gusta ver, se llama WGSN, que habla mucho de tendencias, incluso de tendencias que aún no han llegado, que van a pasar, todo lo que veo en moda se ve reflejado 100% en mobiliario, ahí hablan de colores, de texturas, de materiales. Hay que tener los ojos abiertos” dice.
Daniela explica las tendencias como la inclinación de un grupo de personas hacia algo puntual, un patrón, un material, un color, en general un diseño y que éstas existen en todas las disciplinas. “Como diseñadores es importante estar actualizados, saber qué está pasando en la industria, pero si esto es necesario, es aún más importante no seguir la tendencia por seguirla. Muchas veces seguir la tendencia es borrar esa línea de diferenciación entre las empresas, un cliente valora una marca porque tiene un sello”
Daniela aconseja que hay que ser estratégico y seguir la tendencia si va con el estilo de la marca, pero dándole un valor agregado basado en lo que ya eres como diseñador o como empresa. Es importante entender que las tendencias son pasajeras, sobre todo para las marcas emergentes, es necesario ser cuidadosos de cuando seguir una tendencia o simplemente dejarla pasar y saber adaptarlas a la esencia de la marca.
CÓMO CREAR EN EL MOMENTO EN EL QUE TODO PARECE INVENTADO
“A veces puede ser desalentador en la parte visual o estética, en ocasiones se diseña sin ver un referente y luego vas a Pinterest y lo ves ahí. Lo importante es entonces ir más allá de lo que va a ser el producto en su aspecto físico, es crear un poco más de conciencia, tener en cuenta el usuario, no solo pensar si está en tendencia, es pensar también en la emoción que quieres generar, transmitir algo” propone Daniela.
Darle valor a un producto a través de una historia, crea una conexión con el usuario, encontrar nuevas formas de hacer las cosas pensando en la gente para hacer su vida más sencilla. No se trata de complejizar un diseño con materiales innovadores, a veces, Daniela encuentra en la simplicidad, lo innovador.
DISEÑO Y FUNCIÓN
Son dos conceptos que están conectados. A Daniela le apasiona el tema, además de su interés por cómo la actitud psicológica de las personas cambia a raíz de un diseño. “Dice Jared Spool: Good design, when it's done well, becomes invisible. Él lo relaciona con un aire acondicionado, por ejemplo, en un hotel donde el aire acondicionado no está funcionando bien, ahí te das cuenta del aire acondicionado. Tristemente cuando un producto no está bien diseñado, es cuando notas su diseño” dice Daniela. Si una silla de un restaurante te incomoda, un butaco que tiene una altura desproporcionada te hace sentir cansado, tienes una conexión mayor con el producto de una manera desafortunada. El reto es crear un producto que, aunque esté muy bien diseñado, no se vuelva invisible, ahí es donde entra la parte estética. Daniela habla de cómo Donald Norman lo plantea en niveles, donde es fundamental que ambas, función y estética coexistan para tener una experiencia memorable. Uno de los niveles habla de lo estético. Cuando tienes dos productos que funcionan exactamente igual, pero uno es estético y el otro no, psicológicamente vas a preferir usar el estético. Otro nivel habla de lo funcional, una vez el producto sea estético, debe funcionar, es como un check list.
¿Cómo saber si la pieza que estás creando funciona, es estética y a la vez es comercial? Para Daniela, es un trabajo de equipo, el diseñador no tiene la última palabra en la fórmula perfecta de estética, función y el hecho de ser una pieza comercial. “En la creación de una pieza participan múltiples personas que con su opinión ayudan a que un diseño estético y funcional sea realmente comercial. Muchas veces es también ensayo- error, es sacarla al mercado y esperar la reacción de los clientes para saber cómo se puede mejorar, que hay que cambiar, etc. Se trata de interacción” dice Daniela.